En Chinameca, Morelos, desde el mismo lugar donde cayó Emiliano Zapata, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo planteó la meta histórica de lograr el registro agrario para unas 150 mil mujeres en el 2030.
Con ello, Sheinbaum traza una nueva ruta para el campo mexicano: reconocer a las mujeres como propietarias plenas de la tierra y corregir décadas de desigualdad.
Señaló que antes del año 2030, el gobierno federal pretende incorporar a 150 mil mujeres a los registros de derechos agrarios, una cifra que busca revertir siglos de exclusión.
Lee: CNPA-MN exige un cambio de política para el campo mexicano

¿Dónde se hizo el anuncio?
El anuncio se dio en el marco del CVI aniversario luctuoso de Zapata, asesinado en esa exhacienda por los hombres de Jesús María Guajardo Martínez.
Frente a comuneros, ejidatarios y organizaciones del campo, Sheinbaum expuso una realidad persistente: menos del 30% de las tierras con títulos en México son propiedad de mujeres.
¿Por qué hay tan pocas mujeres registradas como dueñas de tierras?
La presidenta explicó que este rezago tiene raíces históricas y culturales.
“Se pensaba que las mujeres no podíamos ser propietarias, ejidatarias o comuneras”, señaló.
Recordó que, incluso si un hombre fallecía dejando solo hijas, la tierra quedaba sin registro válido.
Agregó que esa lógica patriarcal es la que hoy su administración busca desmontar.
“Nos pusimos la meta de que, al 2030, tiene que haber 150 mil mujeres más reconocidas como ejidatarias o comuneras, con todos los derechos agrarios”, subrayó.
Destacó que actualmente solo el 27% de los derechos agrarios reconocidos pertenecen a mujeres.
¿Cómo se construye justicia agraria con perspectiva de género?
Antes del acto conmemorativo, la presidenta y la gobernadora de Morelos, Margarita González Saravia, se reunieron con la familia de Emiliano Zapata en Anenecuilco, cuna del caudillo.
Más tarde, ya en Chinameca, Sheinbaum reiteró que el campo no puede avanzar sin la participación plena de las mujeres.
La presidenta aseguró que la lucha de la Cuarta Transformación tiene como eje la justicia social, el combate a la corrupción y la prioridad a los más desfavorecidos.
“Aunque a algunos no les guste, vamos a seguir con ese principio irrenunciable: primero los pobres”, afirmó.
¿Qué significa gobernar desde la cercanía con el pueblo?
La jefa del Ejecutivo federal también llamó a quienes integran su movimiento a ejercer sus funciones con humildad.
“El recurso del pueblo es del pueblo. Y el gobernante debe vivir en la justa medianía”, enfatizó.
En ese sentido, puso como ejemplo el trabajo territorial de la gobernadora González Saravia, quien —dijo— recorre los caminos del estado para estar cerca de la gente.
“Quien no es humilde, no es de la Cuarta Transformación. Quien gobierna con nuestro movimiento debe estar cerca del pueblo. Si no, no es parte de esta transformación”, sostuvo.
Corazón simbólico del zapatismo
Así, en el corazón simbólico del zapatismo, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció un viraje histórico en el campo mexicano:
Hacer justicia a las mujeres, reconociéndolas no solo como trabajadoras de la tierra, sino como legítimas dueñas de ella.