El arzobispo de Guadalajara, José Francisco Robles Ortega, expresó su escepticismo sobre el proceso de elección del Poder Judicial Federal y consideró que “todo parece indicar que todo ya está planchado”.
Tras la misa del mediodía en la Catedral de Guadalajara, el cardenal señaló que se abstuvo de votar. “No es que no me interese, es que es el ejercicio de la libertad”, declaró.
Además, comentó que en su trayecto hacia la Catedral observó más personas que asistían a misa que a las casillas electorales, lo que, dijo, refuerza la percepción de desánimo entre la ciudadanía.
Robles Ortega manifestó su preocupación por la falta de confianza en el proceso electoral, al considerar que no se percibía como una verdadera reforma judicial, sino como una estrategia para consolidar el poder del partido gobernante.
“Todo parecía indicar que el proceso no era para elegir, sino para posicionarse”, afirmó el arzobispo.
La jornada electoral de este domingo 1 de junio es histórica, al tratarse de la primera elección judicial en México, en la que los ciudadanos votaron para seleccionar ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, magistrados del Tribunal Electoral, jueces de distrito y otros cargos clave.
Sin embargo, la baja afluencia en las casillas generó cuestionamientos sobre la legitimidad del proceso y su impacto en la independencia judicial.
“La gente lo percibe, lo notó, y desde antes había un desánimo generalizado”, concluyó el prelado.






