El año 2025 será recordado como un torbellino de momentos virales y controversias. La cultura pop ofreció risas, debates intensos y distracciones constantes para el público digital.
El beso que costó un empleo
Un concierto de Coldplay en julio provocó un escándalo corporativo inesperado. La cámara de besos del estadio captó a Andy Byron, entonces director de Astronomer, con una mujer que no era su esposa. Los «detectives» de internet identificaron rápidamente a su acompañante como Kristin Cabot, jefa de recursos humanos de la misma empresa.
Ambos protagonistas estaban casados al momento del incidente. La presión en redes sociales y las disculpas falsas obligaron a ambos a renunciar a sus puestos. Este evento demostró que, en la era digital, los secretos no existen.
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Música, venganza y récords inesperados
Lily Allen transformó su divorcio del actor David Harbour en una obra de arte. Su quinto álbum, West End Girl, detalló la ruptura de su matrimonio abierto. El disco se convirtió en un himno para mujeres que han enfrentado situaciones similares.
Por otro lado, Harry Styles sorprendió al mundo del atletismo. El cantante corrió el maratón de Tokio en marzo y el de Berlín en septiembre. En esta última competencia, registró un tiempo impresionante de menos de tres horas. Styles demostró ser uno de los famosos más rápidos de la historia.
De la pantalla al espacio exterior
Katy Perry protagonizó múltiples titulares por su viaje al espacio con Blue Origin. Aunque se presentó como un acto de empoderamiento femenino, muchos lo criticaron como una muestra de privilegio. Mariah Carey, al ser cuestionada sobre el viaje, simplemente respondió: «Creo que ya he hecho suficiente».
En el cine, Michelle Yeoh generó un fenómeno viral durante la gira de Wicked. Su explicación sobre el nombre de «Madame Morrible» se convirtió en un remix musical en TikTok. El gesto manual de la actriz acumuló millones de reproducciones en pocos días.
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Fenómenos virales y debates sociales
Sydney Sweeney enfrentó críticas por una campaña publicitaria de jeans. Algunos usuarios calificaron el anuncio de American Eagle como insensible y fuera de lugar. Pese a la controversia, las ventas de la marca aumentaron considerablemente tras el debate en redes.
Finalmente, el mundo se obsesionó con Labubu, un juguete de vinilo con orejas puntiagudas. Estrellas como Rihanna y Lisa de Blackpink popularizaron este accesorio. El personaje provocó largas filas de consumidores en tiendas de todo el mundo.
