Ciudad de México, 27 jun. (AMEXI).- La presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Marcela Guerra Castillo, afirmó que la reforma al Poder Judicial debe reflejar la apertura democrática del Congreso de la Unión.
“Es un momento definitorio en el que la democracia se debe abocar a revisar cómo funciona una de sus ramas y en mejorarla en beneficio de su depositario supremo que es el pueblo mexicano”, aseveró en el inicio de los Diálogos Nacionales sobre la Reforma Constitucional al Poder Judicial.
Que los poderes democráticos aquí convocados, indicó, “nos entreguemos, con visión de Estado y patriotismo, a confeccionar una reforma que mejore la vida de la República”.
Lee: Reforma al Poder Judicial en sus términos pone en riesgo la justicia imparcial: González Alcántara
Guerra Castillo se pronunció por analizar las condiciones necesarias para mantener la independencia de los jueces, debatir el funcionamiento de los poderes judiciales locales y el por qué congestionan a la jurisdicción federal; y buscar la mejor forma de supervisar el recto y ético ejercicio de la judicatura.
Asimismo, abundó, por hacer “la justicia accesible a todas las personas y no sólo a los pudientes”, y generar condiciones para que todos los juicios sean más ágiles y rápidos.
El PAN quiere que escuchen sus argumentos
A su vez, el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Jorge Romero Herrera, reconoció la voluntad al diálogo que existe para esta reforma y otras que vendrán.
El legislador panista llamó a intercambiar las ideas más allá de decisiones que estén preestablecidas, con un afán de mejorar los productos finales.
Acción Nacional, dijo, debe ser una oposición que centre su debate en proponer y dar argumentos técnicos y jurídicos.
“Nosotros no vamos ya a enfocarnos en señalar y descalificar. Nosotros queremos argumentar y que se escuchen nuestros argumentos”, apuntó.
Consideró que en la reforma judicial hay coincidencias, como es en el plazo máximo para resolver los asuntos judiciales a favor, la reconfiguración administrativa y disciplinaria interna y las disposiciones políticas de austeridad.
No obstante, señaló que se centrará el debate y la argumentación en “no perder con un nuevo modelo la independencia y la autonomía que deben tener sustancialmente las mujeres y hombres que juzguen en el país, que se encuentre un punto medio”.
Por su parte, el coordinador de los diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Rubén Moreira Valdez, cuestionó: ¿Cómo exigimos justicia pronta si no hay juzgados suficientes y mucho menos cercanos al justiciable o si no se les remunera correctamente a los integrantes de estos poderes?
“Queremos un Poder Judicial al cual no se le pida ser parte y mucho menos se le trate de imponer un criterio alejado de la Constitución y de los tratados internacionales”, expuso.
El diputado priista refirió que, en el país, por cada 100 mil habitantes hay 0.33 jueces federales y 3.49 locales que atienden más de cuatro millones de asuntos nuevos al año.
En México, el proceso de formación y selección de juzgadores federales pasa por estándares de muy alto rigor y calidad, puntualizó.