Ciudad de México, 18 mar. (AMEXI).- La ópera prima del cineasta Saim Sadiq, “Joyland: la tierra de los sueños”, es la primer película pakistaní en participar en el Festival de Internacional de Cine de Cannes, es un drama familiar y de pareja que aborda el tema trans en una sociedad ultraconservadora.
Haider (Ali Junejo) es un joven que vive en la casa familiar guiada por el patriarca Rana Amanullah (Salmaan Peerzada). El joven se encuentra desempleado y disfruta jugar con sus sobrinas, hijas de su hermana que está por tener otro bebé.
Mumtaz (Sarwat Gilani), esposa de Haider, es una maquillista que disfruta su trabajo, ella aporta el dinero que él no puede mientras se encarga de las labores de hogar desde limpiar hasta cocinar. Un amigo le consigue un trabajo como bailarín en un teatro erótico, donde conoce a Biba (Alina Khan) una mujer trans que lucha por hacerse de un nombre en el escenario.
Haider entre los ensayos se enamora de se enamora de Biba mientras su esposa tendrá que dejar su trabajo y ayudar a su cuñada en los trabajos del hogar y el cuidado de los niños. En una sociedad donde todos miran y juzgan es difícil realizar tus sueños.
Saim Sadiq es una joven promesa del cine paquistaní, nos regala una reflexión sobre la familia, los roles de género y el patriarcado que oprime a mujeres y la disidencia sexuales.
“Joyland: la tierra de los sueños” obtuvo el premio Directors to Watch y premios FIPRESCI a Mejor Película en Idioma Extranjero y Mejor Actor (Ali Junejo) del Festival Internacional de Cine de Palm Springs, California, Estados Unidos.
El drama es lento, pero es el preámbulo para mostrarnos una familia paquistaní, sus costumbres, comidas y dinámicas. Se rescata además de de tocar el tema trans la muestra de música y baile del país asiático.
La Cineteca Nacional da la opción de ver un cine lejano que pocas ocasiones se verá en la cartelera comercial.