Naciones Unidas, 1 Oct. (Amexi).- La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) reconoció la labor de dos hermanas mexicanas, Azul y Regina Ramos, para promover el arte y la cultura popular en la ciudad de Acapulco, a través del Centro Cultural “Casa Azul”, dónde se imparten talleres de dramaturgia y poesía.
A casi un año de la devastación que dejó el huracán Otis en los municipios de Acapulco y Coyuca de Benítez, en el estado de Guerrero, las hermanas lograron reactivar su comunidad de impulsar su sueño de crear un recinto cultural, el Centro Cultural Casa Azul, un espacio dedicado a proyectos creativos y artísticos.
Desde pequeñas, Azul y Regina se han sentido atraídas por el arte y por la cultura y como no había centros educativos de arte en su localidad, se prepararon de forma autodidacta para poder llevarlo a su comunidad. Esa fue la razón por la que crearon el Centro Cultural Casa Azul.
El espacio cultural
El espacio cultural, se encuentra en la colonia Pogreso de la ciudad turística de Acapulco y brinda talleres de dramaturgia y de poesía, principalmente a niños, y es escenario para las presentaciones de libros de varios escritores.
La UNESCO destacó que Azul Ramos, escritora, fotógrafa, poeta, y estratega digital, y Regina Ramos, dramaturga y escritora, han estudiado y aprendido lo que saben de manera totalmente autodidacta, pues en su localidad no existe el apoyo suficiente por parte del gobierno del estado de Guerrero.
Gracias al aprendizaje autónomo que primero emprendió Azul, y que luego compartió con su hermana menor, Regina, ambas han sido ganadoras de diversas becas para jóvenes creadores, una de ellas otorgada por la UNESCO, un organismo de las Naciones Unidas (ONU) que contribuye a la paz y seguridad global a través de la educación, la ciencia, la cultura y las comunicaciones.
“Aquí en Acapulco no hay escuelas, hubo un intento de una escuela de escrituras, pero no se sostuvo. Hubo una escuela independiente, pero la administración pública municipal no le dio seguimiento. Por eso, la educación ha tenido que ser autónoma”, explicó Azul.
El comienzo de un sueño
Ambas hermanas, desde pequeñas, se han sentido atraídas por el arte y por la cultura, por ello se han preparado y cuentan con lo suficiente para compartir con su comunidad. Así fue cómo surgió la idea de crear el Centro Cultural Casa Azul, que se fue materializando poco a poco.
“Ya lo venimos maquinando desde hace tiempo (…) Primero, había emprendido un proyecto con mi mamá; estaba en el centro, era un restaurante con centro cultural, pero después empezó a haber cobro de piso por parte del grupo organizado (las extorsionó un grupo criminal), y pues decidimos cerrar para evitar cualquier problema”, indicón Regina.
Nosotras, añadió la menor de las hermanas, habíamos pasado por un momento muy triste; habían levantado (secuestrado) a un primo, y por eso mejor decidimos dejar el restaurante. Entonces seguimos postergando el proceso de seguir con el Centro Cultural. Fue complicado, ni siquiera nos pasaba por la cabeza hacerlo”.
Cuando llegó el huracán Otis, que azotó fuertemente a los municipios de Acapulco y Coyuca de Benítez en Guerrero, fue que las hermanas comenzaron a reactivar ese sueño de poder compartir con su comunidad, creando un centro de apoyo para llevar víveres a sus vecinos más afectados. Fue tanto el éxito que crearon una red de apoyo gracias a las redes sociales.
Apoyo de la UNESCO
Azul encontró una convocatoria del Fondo de Emergencia para el Patrimonio de la UNESCO en México y las Secretarías de Cultura federal y estatal de apoyos económicos a propuestas de talleristas y espacios culturales independientes de Acapulco y Coyuca de Benítez que ameritaban reparación o recuperación, la oportunidad ideal para impulsar su proyecto.
“Participamos en una convocatoria de la UNESCO para reactivar la cultura. Ella [Regina] metió un taller de dramaturgia y yo uno de poesía. Nos reactivamos y dijimos creo que es momento de abrir el Foro, fue una señal para nosotras”, recordó Azul, según el sitio de Noticias de la ONU.
Abrimos el espacio debajo de nuestra casa, explicó la joven, empezamos a adecuar las cosas y a pintar. “Nosotras hemos hecho todo, es un espacio muy independiente, y tenemos fe de que será un espacio que motive a nuestros vecinos; será un espacio de expresión”.
El Centro Cultural Casa Azul es un espacio creado para la difusión, la profesionalización y el compartimiento de experiencias a partir del arte. Tanto Azul, como Regina, imparten talleres de dramaturgia y de poesía, y se realizan diversas actividades, como presentaciones de libros y bazares culturales.
Lee: Geoparque Comarca Minera podría perder estatus de UNESCO