La guerra de David contra David fue para Benavidez, quien venció por decisión unánime a Morrell en una guerra que fue la estelar en la T.Mobile Arena de Las Vegas.
Este triunfo le permite a David Benavidez aspirar al título indiscutido semicompleto, pues se convirtió en retador y sólo tendrá que esperar al vencedor de Artur Beterbiev, actual monarca, y Dmitry Bivol.
La mala sangre y rivalidad que crearon en toda la promoción no fue una broma y lo demostraron desde el inicio de la pelea, pero tras 12 rounds el triunfo fue para Benavidez con tarjetas de 115-111, 115-111 y 118-108.
Insultos, un empujón y hasta la agresión con uno de los campeonatos se vivió en las semanas previas, y la guerra continuó en el ring.
A darse con todo
Comenzaron tranquilos, con el jab, pero solo unos segundos, pues pronto comenzó la guerra, los bombazos y las ganas de noquear y lastimar al oponente.
Y así continuaron. La fuerza y la presión fueron del llamado «Monstruo Mexicano», mientras que la elegancia, los movimientos en el ring y la velocidad lució del lado del cubano.
David Benavidez buscó hacer daño con golpeo al cuerpo, con ganchos y derechas de poder, presionando en todo momento. Buscó llevar a las cuerdas a su rival y lastimarlo.
Morrell se movió en el ring, contragolpeó a velocidad y con volados frenó los ataques de Benavidez, quien fue apoyado por la afición con los gritos de “México, México”.
Los que apoyaban a Morrell respondieron con el “Cuba, Cuba”, y eso pareció motivarlo, pero Benavidez, quien invitó a su rival a atacarlo, lo golpeó una y otra vez de forma violenta.
Intercambio de puñetazos
El intercambio de golpes fue una constante, los rounds cerrados y la pelea emocionante. Las huellas de la batalla se reflejaron en sus rostros, pero Benavidez pareció tomar ventaja.
Así llegaron a la parte final de la pelea y más emociones, sobre todo en el undécimo round, cuando Morrell conectó a Benavidez, este tropezó y se fue a la lona.
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Esa caída pudo haber sido determinante ante lo cerrada que parecía la pelea, lo que obligó a Benavidez a ir al ataque en los últimos segundos del asalto.
Benavidez acorraló a Morrell y en el último segundo lo conectó, sonó la campana y después el cubano respondió con un golpe, por lo cual fue penalizado con un punto.
Último round
Salieron a noquear en el último episodio, pero sin lograrlo. Cerraron con un intercambio de golpes y ahí terminó la rivalidad.
Se abrazaron y se reconocieron en el ring, demostrando caballerosidad, antes de que se anunciara al vencedor Benavidez, que defendió el título interino semicompleto del CMB y ganó el regular de la AMB.
Benavidez mejoró su récord a 30-0, con 24 por la vía del nocaut, y terminó con el invicto de Morrell, quien se quedó con 11-1, 9 antes del límite.