Ciudad de México, 24 mar. (AMEXI).- Donovan Carrillo exhibió en el Campeonato Mundial de Patinaje Artístico sobre hielo de Montreal, Canadá que no tiene techo, que sus ambiciones competitivas no tienen límites.
El jalisciense finalizó en la plaza 15 del mundial, con una ruta libre desarrollada el sábado por la noche para los 152.48 puntos y un total de 232.67 unidades, que lo pone en la meseta que tiene a los mejores del orbe.
La posición 15 representa más que una medalla de oro para el emblemático del patinaje artístico en México, una nación que no tiene cultura ni desarrollo programado en esta disciplina.
Donovan inició a practicar el patinaje artístico sobre hielo a los 13 años de edad, luego de ver por su televisor los Juegos Olímpicos de Invierno de Vancouver 2010 y también impulsado por su hermana.
Empezó en Guadalajara y de ahí partió porque la pista de los entrenamientos cerró y aterrizó en León y así siguió de pista en pista con entrenamientos al más alto nivel.
Su premio, entre muchos, fue clasificar a los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing 2022, para ganar el apodo de “Príncipe del hielo” por llegar a la final, donde concluyó en la posición 21 con 218.13 puntos.
“Para todos esos niños a los que les han dicho que es de locos siquiera intentarlo, me gustaría decirles que tomen esas palabras como su principal motivación y demuestren que sí se puede”, expresó a olympics.com.
Aparte de su gracia, ritmo y técnica para sus ejercicios, se ha hecho acompañar por diversos ritmos, como “Hasta que te conocí”, “Black Magic Woman” y “Shake it”, con lo cual atrapa a la diversidad de públicos y escenarios.
En este mundial de Montreal logró uno de sus tantos sueños, en virtud que registró 80.19 puntos en el programa corto de sus rutinas y con ello llegar a la final.
“He estado siguiendo los 80 puntos durante tanto tiempo que me sentí increíble cuando apareció ese número”, compartió a Golden Skate.
El sábado acompañó su rutina final con “Bésame mucho” e “Historia de un amor”, en voz del fallecido ídolo Pedro Infante, y su gracilidad e interpretación en sus movimientos y técnica le hizo atrapar al público que se le entregó en una gran ovación.
“Esta es la competencia que más he disfruta en mi vida”, volvió a compartir a Golden Skate.
Ahora el camino, que fue sinuoso, es brillante y sobre ese mismo avanza para llegar a los Juegos Olímpicos de Invierno Milán-Cortina, Italia, en 2026.