Sobre los campos de entrenamientos de tierra suelta que se convierte en lodo cuando llueve o las canchas con su césped que parece una alfombra en unos de los tantos estadios mundialistas o modernos, siempre está un entrenador que guía, que alienta, que se desgañita y, sobre todo, que enseña.
En el campo está el entrenador gruñón, como se le vio a Ricardo “Tuca” Ferretti, pero quien con sapiencia dirigió a jugadores y equipos a ganar campeonatos.
Están los entrenadores que formaron y dieron oportunidades a jóvenes que marcaron historia, como Efraín Flores, quien le dio el 19 de octubre de 1996 el debut a Rafa Márquez, uno de los más grandes en la cantera de Atlas y en el futbol mexicano, porque cuatro meses después hizo su debut en la selección mayor.
Ahí, en Atlas, también está Ricardo Antonio LaVolpe con oportunidad a jóvenes que brillaron, pero sobre todo los entrenadores que hicieron su trabajo en fuerzas básicas.
La oportunidad a jóvenes talentosos
En Pumas de la UNAM también hubo entrenadores que formaron grandes futbolistas desde las fuerzas básicas, como Hugo Sánchez, Luis García, Luis Flores, Manuel Negrete y Héctor Moreno, entre varios.
Hoy en día están los entrenadores de fuerzas básicas de Tuzos de Pachuca, quienes surten al primer equipo y por eso hay sobre ellos la referencia de la “chiquillada”, porque son jóvenes que ilusionan con su futbol fresco y lleno de energía.
En el Día Mundial del Entrenador de Futbol, que se celebró ayer martes, es bien merecido recordar el momento en que Hirving “Chucky” Lozano rindió un homenaje con lágrimas y palabras llenas de cariño y agradecimiento al Profe Enrique Meza.
Esto sucedió el 13 de junio del año pasado, durante su presentación como nuevo jugador de San Diego, de la Liga Mayor estadunidense.
Al hablar de sus inicios de futbolista recordó esa relación superbonita con el Profe Meza, al agregar que “para mí es como, no sé (hizo una pausa, tomó aliento y con voz entrecortada agregó que) es como un padre en el futbol”.
Desde cualquier parte donde jugó siempre habló con su padre futbolístico, al compartir que “desde Italia hemos tenido comunicaciones muy bonitas y todos los días me da un consejo diferente”.
Con lágrimas que perlaron su rostro, compartió que “le tengo mucho cariño. Siempre me apoyó desde el inicio y tengo muchas cosas bonitas de recuerdos sobre él”.
Chucky Lozano hizo su debut el 8 de febrero de 2014, en encuentro en el Estadio Azteca y es uno de esos momento inolvidables con su entrenador.
“Antes de entrar me dice ‘Chamacho, tú no te preocupes, tú juega como vienes jugado, olvídate de alrededor del estadio y tú juega como tú sabes jugar’ y entré y, bueno, lo demás ya es historia”, expresó, porque su debut fue de ensueño, le hizo gol al América y Pachuca ganó 1-0.
«𝙋𝙡𝙖𝙮 𝙡𝙞𝙠𝙚 𝙮𝙤𝙪 𝙖𝙡𝙬𝙖𝙮𝙨 𝙥𝙡𝙖𝙮.»
Chucky on his first coach and mentor, Enrique Meza. pic.twitter.com/W1sHSxugJM
— San Diego FC (@sandiegofc) June 13, 2024
Chucky Lozano fue campeón con Pachuca, con el PSV Eindhoven en dos ocasiones y Nápoles, también dos veces, además de ser seleccionado nacional juvenil y categoría mayor.
Ahí está esa gran historia de un entrenador y un jugador, en el marco del Día Mundial del Entrenador de Futbol.
