Tottenham Hotspur se impuso al Manchester United con marcador de 1-0 en la final de la Europa League para conseguir su primer título continental desde la temporada 1983/1984. El duelo entre los lugares 15 y 16 de la Premier en Bilbao fue de mucha intensidad física y de unos Spurs que hicieron su mejor imitación de un frontón, pues, desde que consiguieron la ventaja, se plantaron en su área y rechazaron cualquier pelota que estuviera en su último tercio.
La zaga defensiva fue la estrella del equipo londinense, pues los defensores, comandados por Cristian “Cuti” Romero, resistieron todo el segundo tiempo corriendo tras la pelota y cerrando todos los espacios. Del otro lado, la historia recordará a un Manchester que tuvo el 80% de posesión de la pelota y no la supo convertir en goles, algo que pesará en la consciencia de jugadores y aficionados por un largo tiempo.
Y para la historia también quedará que Son Heung-min logró su primer título con los Spurs después de una década con el equipo. A diferencia de Harry Kane, que partió a otro país para poder conseguir su primer trofeo, el astro surcoreano se mantuvo fiel a la institución y fue recompensado de gran manera.
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La calma antes de la tormenta
Ambos equipos fueron cautelosos y físicos durante los primeros 45 minutos. Las oportunidades fueron escasas y las faltas en la media cancha interrumpieron de forma constante el flujo del encuentro, principalmente por parte de los Spurs que cometieron 12 infracciones en la primera parte.
Ningún equipo lograba romper el la defensa rival y parecía que el descanso llegaría sin anotaciones, pero en el minuto 42, Brennan Johnson alcanzó a rozar la pelota en un centro por izquierda, esta rebotó en el cuerpo de Luke Shaw y André Onana no pudo evitar que la pelota entrara agónicamente a su puerta para poner al frente al equipo londinense.
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— Tottenham Hotspur (@SpursOfficial) May 21, 2025
El Tottenham plantó sus pies en la tierra
En el segundo lapso, el Tottenham tomó una postura sumamente pasiva. Le otorgó toda la iniciativa al Manchester United y en ningún momento intentó bajar las revoluciones o retomar el control del balón. Por su parte los Red Devils fueron de menos a más, pues con todo el control del esférico, tarde o temprano llegarían con peligro a la portería de Guglielmo Vicario.
Al minuto 68 estuvo cerca el empate, cuando el arquero italiano no midió bien la pelota y el rebote le quedó al danés Rasmus Højlund, pero su remate de cabeza fue rechazado en la línea por Micky van de Ven para salvar la ventaja.
El final del encuentro fue explosivo, pues el Man. U, con el recuerdo de su partido ante Lyon, mandó una cantidad enorme de centros al área para ver si la magia que tuvieron en el torneo seguía viva. Y en un par de ocasiones el gol estuvo cerca, pero la defensa y Vicario les negaban el empate. Y tras una chilena de Casemiro que se fue desviada, el árbitro central pitó el final del encuentro y confirmó a Tottenham como el nuevo campeón de la Europa League.