Yésica “Kika” Chávez está a unos días de vivir un momento soñado: su inducción al Salón Internacional de la Fama del Boxeo.
Será este domingo en Canastota, Nueva York, casi cuatro años después de su última pelea, cuando Yésica Chávez sea reconocida.
“Estoy feliz, plena, agradecida con Dios por esta oportunidad tan hermosa, a unos días de sentir la gloria en mis manos”, dijo la boxeadora en entrevista con AMEXI.
La Kika Chávez comenzó su carrera profesional el 12 de junio de 2006 y logró dos títulos del mundo.
Conquistó el cetro minimosca de la FIB y el mosca del CMB, el segundo del que hizo seis defensas, pero siempre dejando el corazón en el ring.
“No sé a quién se le ocurriría el nombre de Kika (para el Salón de la Fama), pero estoy muy agradecida de que mi trabajo les haya gustado”, dijo.
“Cuando peleé lo hice con amor, di el corazón entero y creo que eso es lo más importante. Cuando tú peleas con amor y das amor a lo que haces, el mundo te reconoce, entonces suceden las cosas”, añadió.
“Kika” Chávez recuerda grandes momentos, y va por más
La carrera de la pugilista mexicana quedó marcada por grandes momentos, uno el de su primer título del mundo.
“Mi victoria sobre Irma ‘Güerita’ Sánchez nunca lo voy a olvidar. Iba contra todo, prácticamente sabía que iba a perder y en una decisión dividida tan polémica, que todos sabemos que no fue así, dije ‘ya me robaron’ y me alzaron la mano, fue un momento único para mí, nunca lo voy a olvidar”.
Yésica ingresará al recinto donde ya hay dos mexicanas: Laura Serrano y Ana María “Guerrera” Torres.
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Pero la carrera de la Yésica no ha terminado pese a ingresar a Canastota, pues afirma que volverá, pues quiere otro título.
“Quedé muy chava sin poder pelear y con muchos deseos de conquistar mi tercer título del mundo, así que vamos por ese nuevo intento”, concluyó.