El conflicto entre Israel y Palestina, que se ha extendido por más de un siglo, atraviesa una nueva etapa marcada por el reconocimiento simbólico de Palestina como Estado por parte de decenas de países.
Sin embargo, para el maestro Carlos Manuel López Alvarado, internacionalista de la UNAM, la posibilidad de que se concrete su plena membresía en la ONU sigue siendo, en sus palabras, “un escenario cercano a la ciencia ficción” mientras Estados Unidos mantenga su poder de veto en el Consejo de Seguridad.
La Declaración Balfour de 1917, cuando Reino Unido impulsó un “hogar nacional judío” en Palestina
La partición aprobada por la ONU en 1947 mediante la Resolución 181, que derivó en la guerra árabe-israelí de 1948
Y la Guerra de los Seis Días en 1967, con la ocupación israelí de Jerusalén oriental y Cisjordania
En este contexto, Hamás surge en 1987, durante la primera intifada, como un movimiento islamista con base social y política que, con el tiempo, se radicalizó y tomó el control de Gaza en 2007.
“Hamás es fruto de la violencia estructural y sistemática ejercida contra el pueblo palestino”, sostiene.
El especialista de la UNAM, Carlos Manuel López Alvarado subraya las diferencias entre la Autoridad Nacional Palestina, que apuesta por el camino diplomático y ha logrado reconocimiento político en distintos foros internacionales, y Hamás, cuya estrategia se centra en la resistencia armada. AMEXI/FOTO/ ONU
Estrategias divergentes: Autoridad Palestina vs. Hamás
El especialista de la UNAM subraya las diferencias entre la Autoridad Nacional Palestina, que apuesta por el camino diplomático y ha logrado reconocimiento político en distintos foros internacionales, y Hamás, cuya estrategia se centra en la resistencia armada.
“Desde 2017, Hamás aceptó la idea de un Estado palestino en las fronteras de 1967, pero sigue sin reconocer a Israel”, explica.
El peso de las potencias internacionales
López Alvarado señala que, históricamente, las potencias occidentales han jugado un papel determinante. Reino Unido, en su rol colonial, dio origen al conflicto; mientras que Estados Unidos, desde mediados del siglo XX, se convirtió en el “tutor de facto” del proceso de paz, priorizando los intereses de Israel.
Europa, con países como Francia, Alemania y España, ha mostrado mayor apertura al reconocimiento palestino, mientras que potencias como Rusia y China han mantenido una participación marginal.
En contraste, Irán ha tenido un rol silencioso pero activo, brindando apoyo político, financiero y militar a grupos como Hamás y situándose como contrapeso regional a Israel y Washington.
El reconocimiento internacional: símbolo y presión
Aunque más de 130 países han reconocido a Palestina como Estado, el especialista advierte que este avance tiene límites claros:
“No es un acto menor. Es colocarse del lado correcto de la historia, pero mientras Estados Unidos mantenga su veto, el reconocimiento pleno seguirá bloqueado”.
Para López Alvarado, el gesto diplomático es simbólico pero no irrelevante: legitima la causa palestina, aísla a Israel y cuestiona el liderazgo estadounidense en Medio Oriente.
“Es también una condena al genocidio sistemático que se comete contra el pueblo palestino”, enfatiza.
México y el reto diplomático
Respecto al papel de México, el internacionalista destaca que el país ha mantenido una posición constructiva:
Recibió a un embajador palestino
Respaldada en la ONU la ampliación de derechos para Palestina
Y reitera su apoyo al alto al fuego
No obstante, reconoce que la cercanía política, económica y financiera con Estados Unidos limita su margen de maniobra.
“México puede ser un puente diplomático entre Occidente y el Sur Global, pero su postura siempre estará condicionada por Washington”, señala.
Perspectivas en la ONU
Con relación a la próxima discusión en Naciones Unidas, López Alvarado es claro: Palestina cuenta con los criterios jurídicos para ser reconocida como Estado bajo la Convención de Montevideo, pero el obstáculo seguirá siendo político.
“Mientras Estados Unidos no ceda en su control regional, no habrá un reconocimiento pleno. Lo demás seguirá siendo simbólico, aunque importante en términos históricos”.
El especialista concluyó con un llamado:
“Es hora de que México y el mundo nombren lo que ocurre en Palestina como lo que es: un genocidio sistemático y estructural. No hacerlo es quedarse del lado equivocado de la historia”.
Palestina cuenta con los criterios jurídicos para ser reconocida como Estado bajo la Convención de Montevideo, pero el obstáculo seguirá siendo político. AMXI/FOTO/ ONU
Carlos Lara Moreno es un periodista mexicano con casi 20 años de trayectoria, reconocido por su pasión, rigor y capacidad para estar siempre donde está la noticia. Su cobertura informativa abarca desde los pasillos del poder político hasta las zonas más afectadas por tragedias naturales, pasando por momentos históricos de alcance global.Originario del Estado de México y formado en el CCH Vallejo y la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, Carlos comenzó su carrera en TV UNAM y rápidamente dio el salto a W Radio, donde fue asistente de la Jefatura de Información y colaboró con medios internacionales de la Cadena Prisa. Su talento narrativo y capacidad de análisis lo llevaron a Televisión por Cable (TVC), donde pasó de redactor a coordinador nacional e internacional de información.En 2009 se integró a la Organización Editorial Mexicana, donde como reportero de El Sol de México cubrió la presidencia de Enrique Peña Nieto, los sismos de 2017 en la Ciudad de México y la devastación provocada por los huracanes "Ingrid" y "Manuel" en Guerrero, entre muchas otras noticias. Su trabajo ha dado voz a víctimas, comunidades marginadas y movimientos sociales.A nivel internacional ha sido testigo directo de momentos clave en la historia de la Iglesia Católica: cubrió la entronización del Papa Francisco y los funerales , el Cónclave en el que fue electo el Papa León XIV, así como otras coberturas papales en el Vaticano. También ha documentado conflictos diplomáticos como la ruptura de relaciones entre México y Ecuador.Actualmente, colabora con estaciones de radio y medios digitales tanto en México como en el extranjero. En redes sociales se define como “reportero todo terreno”, con presencia activa en X (antes Twitter) e Instagram. Su lema, “24/7/365”, resume su compromiso inquebrantable con el periodismo.(Y esto es solo una parte de su historia…)