Corresponsales
Acapulco. Gro., 13 jun (AMEXI).- “Si en una semana no nos atienden y nos dan el mismo trato que a los demás damnificados que ya recibieron los apoyos gubernamentales, interpondremos una cascada de amparos en contra de la Secretaría de Bienestar por omisión”.
Este fue el ultimátum que lanzó Enrique Meza Montano, vocero de la Comunidad No Censados Acapulco- Otis, al presidente Andrés Manuel López Obrador, quien realizó una vista express a este Puerto turístico para supervisar y evaluar el programa en beneficio de los damnificados del huracán Otis.
En entrevista con esta agencia informativa, Kique Meza como lo conocen sus compañeros de lucha, comentó que este recurso legal si procede, ya que se inscribieron en tiempo y forma en el padrón de la Secretaría de Bienestar y nos han olvidado e ignorado olímpicamente.
Por eso, adelantó a AMEXI, lanzaremos una campaña para solicitar el apoyo de abogados Pro Bono para que lleven nuestro caso a los tribunales.
No nos dejan otro camino y ya estamos cansados de tocar todas las puertas de las dependencias federales, estatales y municipales, desde hace más de siete meses para que nos ayuden, sentenció Meza Montano, quien es una persona discapacitada y perdió su casa durante el paso del huracán Otis.
Que sea un juez, quien obligue a las autoridades a que nos proporcionen la ayuda como damnificados, con base a nuestros derechos legales constitucionales, declaró el portavoz de más de 8 mil 300 damnificados No Censados.
Esta decisión, explicó, fue tomada ante la falta de humanismo, seriedad y de una respuesta satisfactoria a su reclamo por parte del jefe del Ejecutivo federal quien, desde la comodidad y seguridad de la base naval de Acapulco, “supervisó y evaluó” el programa en beneficio de los damnificados del huracán Otis, pero se negó a dialogar con nosotros.
“Cómo dice el presidente en su mañanera de este jueves que va a venir a Acapulco para hacer una evaluación completa de los apoyos entregados a las familias damnificadas del huracán Otis y nos ignora”, cuestionó el vocero Kique Meza.
Enseguida, se quejó de la actitud de Eunice Arias, quien dijo ser funcionaria de la Secretaría de Bienestar federal, quien en el ánimo de atenderlos rápidamente les ofreció ayudar únicamente a los no censados que acudieron a la base naval, bajo el argumento de que solo ellos están interesados en recibir ayuda, ya que se hicieron presentes en esas instalaciones navales.
De inmediato respondí que, si los demás damnificados no vinieron a la base naval, fue porque el presidente decidió realizar una sorpresiva visita al Puerto de Acapulco y no dio tiempo para convocar a los 8 mil damnificados No Censados.