Por Miroslava Callejas, Humberto Huerta y Jesús Mejía, Corresponsal
Tixkokob, Yuc., 25 mar. (AMEXI).- El vagón principal del Tren Maya descarriló esta mañana en el municipio de Tixkokob, Yucatán, sin que se reporten personas lesionadas, sólo se sintió un jalón muy fuerte al salir de los rieles en un cruce de cambio de vía.
Aparentemente tampoco sufrió daños mayores el Tren Maya, aunque existen afectaciones a rieles, durmientes y ruedas.
El percance ocurrió en el tramo que corre de Campeche a Cancún. Autoridades trabajan en el lugar para la reinserción del vagó principal a la ruta.
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Personal del Tren Maya realiza una inspección en el lugar para revisar afectaciones y prevenir otro accidente con ese convoy. El vagón se salió de los rieles cuando llegaba a la estación ubicada en la localidad de Tixkokob, Yucatán, informaron testigos de percance.
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El descarrilamiento sucedió después de las siete de la mañana, hora en que salió de Campeche con destino a Cancún, Quintana Roo, y cuando estaba por arribar a la estación ubicada en el municipio de Tixkokob, el vagón se salió de los rieles.
Afortunadamente, el percance no dejó personas lesionadas y el Tren Maya no volcó, pero levantó gran expectación, suspicacias y polémica porque es un transporte nuevo y presuntamente se construyó con la más alta calidad y bajo estricta supervisión de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), al grado de que el actual gobierno la considera su obra insignia y un asunto de seguridad nacional, por lo que este accidente ocasiona mucha preocupación entre la población.
Fuentes cercanas al Tren Maya señalaron que ya se trabaja para colocar nuevamente el vagón en los rieles y hacer pruebas a fin de garantizar la seguridad de los usuarios y reiniciar su camino hacia Quintana Roo.
Sin embargo, este accidente levanta muchas dudas sobre la calidad de los materiales que fueron utilizados en la obra, sobre todo porque hace unas semanas, el pasado 11 de marzo, el periodista yucateco Carlos Loret de Mola publicó en Latinus una llamada telefónica entre los primos de Andy y Bobby López Beltrán, Pedro Salazar Beltrán y Almílcar Olán, en la que hablan de la mala calidad de los materiales que surtieron para las obras del Tren Maya, como el balastro que se usó en los durmientes, cuya función es dar soporte a los rieles.
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Incluso en la conversación ríen y dicen con tono de burla que el tren se puede descarrilar porque no está certificada la calidad de la piedra que surtieron.
En el reportaje titulado “El cinismo del Clan”, de los periodistas José Manuel Martínez y Mario Gutiérrez, los implicados se burlan y dicen: “A huevo… ¡La red de corrupción!, jajajaja, esos somos nosotros… cada 3 mil metros cúbicos su mochadita, su mochadita para que venga el palomazo que todo está bien… ya cuando se descarrile el tren, ya va a ser otro pedo…”.
Hoy, sólo 14 días después de ese reportaje, ya comenzaron los descarrilamientos, y los testigos del accidente y los pasajeros afectados por el retraso pese a los altos costos del boleto se preguntan: “¿Habrá una investigación contra el clan de corrupción de los hijos del presidente Andrés Manuel López Obrador? ¿Habrá sanciones y castigos ejemplares o todo quedará en la impunidad? ¿Se dará a conocer la información reservada sobre el Tren Maya o seguirá como caso de seguridad nacional?