La Iglesia católica de México exige poner alto a la violencia en el país, afirmó monseñor Francisco Javier Acero Pérez, obispo auxiliar de México, durante una celebración eucarística en la Catedral Metropolitana. Monseñor Acero Pérez ofreció disculpas por la indiferencia ante la violencia y llamó a las autoridades a escuchar a las víctimas y a sus familias.
En la celebración eucarística, monseñor Acero Pérez se refirió al reciente hallazgo en el Rancho Izaguirre, en Teuchitlán, Jalisco. Exigió a los grupos criminales que detengan los asesinatos de inocentes, y señaló que ese presunto centro de adiestramiento y exterminio del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) es evidencia de la «etapa más oscura» del país.
Les compartimos el texto de la homilía pronunciada, por Monseñor Francisco Javier Acero Pérez, OAR. Obispo Auxiliar de México, en esta Catedral Metropolitana de México, en la Misa por las Familias Buscadoras.https://t.co/LhyBdgEwHX
— Catedral Metropolitana de la Arquidiócesis de Mx (@Catedral_CdMx) March 15, 2025

«Cada zapato encontrado es una historia de dolor»
En su mensaje, la Iglesia se pronunció contra la maldad, el ansia de poder y la impunidad. Enseguida destacó el papel de las madres buscadoras, quienes han hecho más por la justicia que muchas instituciones oficiales. «Ojalá todos tomáramos un pico y una pala y nos fuéramos a buscar con ellas», expresó.
Cada zapato hallado en esos sitios representa una vida truncada por la violencia. «No podemos permitir campos de exterminio en ningún lugar del mundo. Son frutos de negligencia y complicidad social«, denunció.
En México, cada día hay personas que despiertan con la esperanza de encontrar a sus familiares en una fosa clandestina. «Esta monstruosidad no puede quedar impune ni archivada en carpetas de investigación», enfatizó.

La Iglesia exige alto a la violencia, pide perdón y demanda acción
Durante la celebración eucarística en la Catedral Metropolitana, monseñor Francisco Javier Acero Pérez presentó a las familias de desaparecidos las disculpas de la Iglesia católica. «Si en algún pastor no han encontrado empatía para escuchar su rabia y dolor, discúlpennos«, declaró.
Señaló que las madres y familias buscadoras son las protagonistas de la lucha por la justicia. «Si hemos sido indiferentes, les pedimos perdón«, insistió. También instó a las autoridades a escuchar a las víctimas.
A su vez, el padre Jorge Atilano González Candia hizo hincapié en que «estamos en la etapa más oscura del país». Aunque ya se sabía de la existencia de estos centros de exterminio, ahora se tienen «testimonios desgarradores» que confirman la magnitud de la crisis, asentó.
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Un llamado a frenar la violencia
En su homilía, monseñor Acero Pérez denunció la indiferencia social ante la violencia. «No podemos quedarnos callados. No podemos permitir que estas masacres continúen».
Exigió a los grupos criminales que detengan los asesinatos y dejen de crear campos de exterminio. «A las mafias criminales les decimos que no pueden matar a más ángeles. ¡Dejen ya de matar!».






