Ciudad de México, 23 sep. (AMEXI).- Los senadores de las comisiones unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos aprobaron, por unanimidad, el dictamen que modifica la Constitución para reconocer los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos.
El dictamen que reforma el artículo 2 de la Carta Magna establece que se reconoce a los pueblos y comunidades indígenas como sujetos de derecho público con personalidad jurídica y patrimonio propio, así como su identidad cultural, con especial atención en el reconocimiento de los derechos de niñas, niños, adolescentes y jóvenes.
El dictamen se turnó a la Mesa Directiva para que sea discutido por el pleno en la sesión de este martes.
Derecho a decidir de pueblos indígenas
La reforma garantiza el derecho a decidir de los pueblos indígenas conforme a sus sistemas normativos a sus representantes y sus formas internas de gobierno, de acuerdo con la Constitución y las leyes aplicables, con excepción de no limitar los derechos político-electorales.
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Además, preservar, difundir y fomentar su cultura, lenguas y educación, con base en sus métodos de enseñanza-aprendizaje.
También prevé promover el desarrollo de la medicina tradicional y prácticas de salud, alimentación nutritiva, bioculturalidad e integridad de lugares sagrados, así como el reconocimiento del trabajo comunitario.
Asimismo, fija el derecho a que los consulten y cooperar de buena fe para adoptar y aplicar las medidas que puedan causar impactos significativos en su vida o entorno, para lo cual les brinda asistencia jurisdiccional idónea.
De igual modo, las autoridades, en el ámbito de sus competencias, deberán establecer las partidas específicas presupuestales para los pueblos y comunidades que administren y ejerzan conforme a las leyes de la materia.
Además, permite a los pueblos originarios conservar su derecho a impugnar determinaciones por las vías legales pertinentes.
Partidos políticos fijan postura
La senadora de origen indígena de Morena, Edith López Hernández, reconoció que el camino no fue fácil, pues son décadas de lucha para que los escucharan frente a la falta de solución real a sus problemas, generados por malos gobiernos y administraciones del pasado.
Dijo que con la reforma garantiza de manera integral los derechos a nuestros pueblos, “se salda una deuda histórica, ya que se reconoce su capacidad de toma de decisiones en pleno respeto a nuestras culturas e identidades”.
A su vez, el panista Ricardo Anaya señaló que los retos de esta reforma son su implementación y establecer la igualdad sustantiva a través de acciones afirmativas.
“La pobreza extrema, la que más duele, 7.0 por ciento, entre la población indígena, 26 por ciento. La movilidad social, particularmente, en el sur del país, siete de cada 10 personas que nacen en pobreza mueren en pobreza.
Si nosotros queremos cambiar esa realidad nos tenemos que hacer cargo no solo de implementar, sino establecer acciones afirmativas”, expresó.
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Por su parte, Luis Donaldo Colosio Riojas, senador de Movimiento Ciudadano, reconoció que el propósito primigenio de esta reforma es hacer justicia.
“Es reconocer la importancia cultural de todas nuestras comunidades indígenas y hacer notar que hay una deuda histórica, de visibilización y de respeto a las comunidades indígenas y afromexicanas”, manifestó.
Se busca poner un piso parejo en un escenario históricamente disparejo en México
Asimismo, abundó, “señalar que al ser un grupo vulnerado necesitan también tener un trato diferenciado, para tener pleno acceso al ejercicio de sus derechos individuales y colectivos. Con esto buscamos poner un piso parejo en un escenario históricamente disparejo en México”.
En tanto, el senador del PRI, Néstor Camarillo Medina, aseveró que esta reforma “no sólo son palabras en un papel, son un reconocimiento sincero a la diversidad cultural que nos enriquece.
Ellos son quienes conocen mejor sus territorios, sus costumbres y su identidad. Su voz debe se debe escuchar en la toma de decisiones que les impacten y a partir de ahora eso quedará garantizado”, puntualizó.
