Ciudad de México, 10 abr. (AMEXI). – El Banco Mundial (BM) recortó a 2.3% su expectativa de crecimiento para la economía mexicana en este año, último del gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador, desde 2.6% estimado en enero pasado, debido a que no ha aumentado la inversión por la relocalización de empresas, fenómeno conocido como nearshoring.
Para 2025, el primero del sexenio de quien resulte ganador en las elecciones presidenciales del 2 de junio próximo, el organismo internacional mantuvo en 2.1% su pronóstico para el Producto Interno Bruto (PIB) de México y para 2026 estima una mayor desaceleración a sólo 2 por ciento.
Los pronósticos oficiales de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para la economía mexicana en este año están un rango entre 2.5% y 3.5% en este año y un intervalo entre 2% y 3% en 2025.
El BM mencionó que a pesar del entusiasmo en torno al nearshoring, la Inversión Extranjera Directa (IED) en América Latina reales sigue por debajo de los niveles observados hace 12 años,
Además, los anuncios de inversiones nuevas siguen disminuyendo, incluso en México, subrayó en su nuevo “Competencia: ¿el ingrediente que falta para crecer?”.
Nearshoring, sin concretarse
El economista jefe del BM para América Latina y el Caribe, William Maloney, dijo que el banco ha considerado a México como el principal representante del nearshoring, pero hasta ahora no ha aumentado significativamente la relocalización de empresas hacia el país.
“Al principio había información, pero si vemos los números de inversión extranjera y los anuncios de fábricas que empiezan de cero, no hemos visto grandes comienzos, no hemos visto aumentos en fabricación, en inversiones en México y eso es una sorpresa”, dijo en videoconferencia.
Precisó que falta de energía en el norte de México, “hay falta de agua y hay tal vez una cierta falta de guía para que los inversionistas extranjeros naveguen en el sistema mexicano”.
PIB en América Latina
Para la economía de América Latina, el Banco Mundial también recortó su previsión de crecimiento para la región a 1.6% en 2024, desde 2.3% en su estimación anterior, ante los bajos niveles de inversión y consumo interno que se suman a las presiones de altas tasas de interés y enormes déficits.
El organismo anticipó que la región crecerá 2.7% en 2025 y 2.6% durante 2026, si bien advirtió que las estimaciones son más bajas con relación a otras partes del mundo.