El Sindicato de Trabajadores del Instituto Nacional para el Desarrollo de Capacidades del Sector Rural (STINCA), rechazó la decisión de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) de disolver el Instituto Nacional para el Desarrollo de Capacidades del Sector Rural (INCA Rural), afectando los derechos laborales.
El STINCA dijo que el director general del INCA Rural informó la decisión a los trabajadores este 6 de mayo de 2025, “sin presentar hasta el momento argumentos técnicos, jurídicos ni presupuestales que sustenten esta medida”.
Frente a esta decisión unilateral de la Sader de extinguir INCA Rural, el STINCA anunció en un comunicado firmado por su secretaria general, Rosalba Calva Flores, que iniciará una jornada de lucha por la defensa del instituto y los derechos laborales de sus trabajadores.
“Hacemos un llamado a todas las organizaciones sindicales, campesinas, académicas y de la sociedad civil a pronunciarse en defensa del INCA Rural. No aceptaremos decisiones unilaterales que afectan el interés nacional”, señaló el STINCA en su comunicado.
Errónea y regresiva la decisión: STINCA
El STINCA, dijo que esta decisión arbitraria pone en riesgo los derechos laborales de quienes, durante décadas, hemos contribuido al fortalecimiento de capacidades técnicas, organizativas y humanas de la población rural.
“Es una decisión errónea y regresiva, particularmente en un momento que demanda mayor inversión en conocimiento, innovación y justicia territorial para el campo”, señaló el STINCA.
En el escrito del Comité Ejecutivo Nacional del STINCA se propone el fortalecimiento del instituto, para seguir desarrollando las capacidades en el campo mexicano. “La labor del INCA es estratégica para avanzar hacia un país con mayor equidad, democracia y soberanía alimentaria”, dicen los dirigentes sindicales.

INCA Rural, con una historia de más de 50 años
El INCA Rural es un órgano desconcentrado de la Sader, que se constituyó como una asociación civil en noviembre de 1973, como Centro Nacional de Capacitación para Empleados de la Banca Oficial Agropecuaria (CENAC BOA).
Posteriormente, el 21 de octubre de 1979 adquiere el nombre de Instituto Nacional de Capacitación para el Sector Agropecuario, extendiendo su alcance a todo el sector rural del país.
A lo largo de más de 50 años, de acuerdo al perfil de los gobiernos en turno, el INCA Rural ha servido para fortalecer al sector agroindustrial o a los pequeños y medianos productores del país, ofreciendo asistencia técnica y capacitación.
Actualmente, en su página, esta institución define su objetivo institucional en dos aspectos:
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Incrementar las capacidades para la vida y el trabajo de la población rural, preferentemente en zonas de alta y muy alta marginación.
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Incrementar el reconocimiento de las competencias laborales que tiene la población rural, preferentemente en zonas de alta y muy alta marginación.