Ciudad de México, 23 mar (AMEXI).- Después de 56 años, los Diablos Rojos del México y los Yanquis de Nueva York se vuelven a ver las caras y será este domingo en el campo del estadio Alfredo Harp Helú, que para esta serie histórica de dos encuentros estrena pasto artificial de última generación.
Al igual como fue en aquel entonces, estos dos partidos a desarrollarse domingo y lunes, genera una efervescencia y expectación inusitada entre la multitudinaria cobertura de los medios de comunicación y una euforia entre los miles de aficionados afortunados que asistirán al estadio.
Tres días después de su arribo a la Ciudad de México, el lanzador estadounidense Trevor Bauer se declaró listo para cumplir con la encomienda de ser el pitcher abridor por los Diablos Rojos ante los Yanquis de Nueva York.
Bauer conquistó el premio Cy Young en la temporada 2020 jugando para los Rojos de Cincinnati, con una marca de 5-4 y una efectividad de 1.73 de carreras limpias.
Un año más tarde jugó con los Dodgers de los Ángeles, donde obtuvo una marca de 8-5 con 2.59, pero luego desapareció y a su retorno el año pasado, pero en Japón con Yokohama, alcanzó registro de 10-4.
Se espera que con los Bombarderos del Bronx vengan al menos tres mexicanos: el jardinero Alex Verdugo firmado en meses pasados, el lanzador zurdo Víctor González y el cátcher José Treviño.
1968, la última vez que se enfrentaron
La de este fin de semana será la segunda serie que cumplan Diablos y Yanquis en su historia y coincidencia o no, después Diablos se coronó y ahora quieren que se repita esa buena suerte de los Bombarderos del Bronx, porque el conjunto escarlata no gana el título desde 2014.
Aquella primera vez fue hace 56 años, en 1968, celebrada en el extinto parque del Seguro Social con empate tras dos partidos, con resultados de 5-3 para Diablos y 9-1 para la novena neoyorquina.
Por los Diablos abrieron los partidos Ramón Arano y Alfredo Zurdo Ortiz.
Como pasó en esos dos días en el parque del Seguro Social, el 18 y 19 de marzo de 1968, esta vez se la afición va llenar las gradas del Estadio Alfredo Harp Helú, que tiene una capacidad de más de 20 mil espectadores.
Una vez que Diablos cumpla con estos dos partidos, seguirán con su preparación de cara al arranque de la temporada 2024 de la Liga Mexicana de Beisbol, el 11 de abril ante los Pericos de Puebla.