En el primer trimestre del 2025, el monto acumulado por el envío de remesas a México resultó de 14 mil 269 millones de dólares, un nivel máximo histórico para un periodo similar desde que se tiene registro de estos flujos (1995) y que implicó un incremento anual de 1.3 por ciento.
El Banco de México (Banxico) informó que, tan sólo en marzo, los ingresos por remesas provenientes del exterior se situaron en cinco mil 150 millones de dólares, lo que significó un repunte de 15.5% respecto a febrero, luego de cuatro meses a la baja.
En su comparación anual, las remesas que mandan los mexicanos en el exterior crecieron 2.7% respecto al mismo mes del año pasado, tras la caída de 0.8% anual en febrero, según datos del instituto central.
Remesas, con casi año y medio de incertidumbre: BBVA Research
El economista senior en México de BBVA Research, Juan José Li Ng, comentó que las remesas llevan casi un año y medio con incertidumbre.
En los últimos siete meses, las remesas han registrado tres alzas, una de gran magnitud en noviembre de 2024 del 10.6%, y 4 decrementos de entre 0.8% y 5.0 por ciento.
“La política antinmigrante del presidente Trump ha generado un ambiente hostil hacia la población migrante mexicana que ya tiene años residiendo en Estado”, subrayó en un análisis.
Sin afectaciones, el desempleo de migrantes mexicanos en EU
Respecto a los datos de las remesas a marzo de este año, comentó que, en el tercer mes del año, la tasa de desempleo nacional en Estados Unidos se mantuvo relativamente baja en 4.2%, nivel similar a los registrados en los últimos 10 meses.
En los últimos cinco años, de diciembre de 2019 a marzo de 2025, la población empleada en Estados Unidos creció en 4.7 millones, de los cuales el 92.4%, 4.3 millones, fueron personas de origen hispano o latino, lo que refleja la gran importancia de esta población en la economía actual de ese país.
Sin afectaciones la tasa de desempleo de los migrantes mexicanos (documentados y no documentados) en Estados Unidos, fue de 5.0% en marzo de 2025, nivel similar al reportado entre 2023 y 2024.
Tampoco se han observado cambios relevantes en la tasa de participación laboral y en el porcentaje de empleos de tiempo parcial en el actual entorno con políticas antimigratorias más agresivas.