Las intenciones del gobierno de Estados Unidos de poner en pausa su apoyo financiero a las organizaciones humanitarias de las Naciones Unidas pone en “peligro” a millones de personas en todo el mundo, principalmente en regiones vulnerables o países afectados por la guerra.
El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, dio a conocer la víspera su postura a la reciente a la orden ejecutiva del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de suspender su financiamiento a las agencias humanitarias de la Organización.

El 24 de enero pasado, días después de que Trump inició su segundo mandato, el mandatario firmó una orden ejecutiva para suspender los fondos de miles de millones de dólares que la administración estadunidense brinda para los programas de ayuda exterior, incluidos los programas de la ONU.
En una carta enviada al personal humanitario de las Naciones Unidas, Guterres lamentó la decisión estadunidense e hizo un llamado a «garantizar la entrega de actividades humanitarias críticas y de desarrollo».
La ONU buscará mitigar el impacto
El titular de la ONU afirmó que el organismo que preside seguirá participando activamente en la evaluación y mitigación del impacto de la orden emitida por la nueva administración estadunidense.
«Ahora, más que nunca, la labor de las Naciones Unidas es crucial… Juntos, nos aseguraremos de que nuestra organización continúe sirviendo a las personas necesitadas en todo el mundo con un compromiso inquebrantable», subrayó.
El impacto global que puede traer la iniciativa de Trump también fue examinado por los responsables de diferentes organizaciones humanitarias de la Organización en la sede de la ONU en Ginebra, entre ellas, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
“El UNFPA ha suspendido los servicios financiados por subvenciones estadunidenses que proporcionan un salvavidas para las mujeres y las niñas en crisis, incluso en el sur de Asia», indicó Pio Smith, director general del organismo de la ONU encargado de la salud sexual y reproductiva.
De acuerdo con la oficina del UNFPA en Asia, la falta del apoyo de Estados Unidos probablemente resultará en mil 200 muertes maternas adicionales y 109 mil embarazos no deseados adicionales en los próximos 3 años.
El impacto inmediato recaerá en mujeres y recién nacidos
En medio de la incertidumbre sobre el futuro financiamiento de los Estados Unidos, Smith consideró que el impacto inmediato de la decisión del presidente Trump recae principalmente en las personas en los entornos más pobres del mundo.

«Las mujeres dan a luz solas en condiciones insalubres; el riesgo de fístula obstétrica aumenta, los recién nacidos mueren por causas prevenibles; Las sobrevivientes de violencia de género no tienen a dónde acudir en busca de apoyo médico o psicológico», indicó.
El funcionario de la ONU expresó su confianza en que el gobierno de Estados Unidos “mantenga su posición como líder mundial en desarrollo y continúe trabajando con el UNFPA para aliviar el sufrimiento de las mujeres y sus familias como resultado de catástrofes que no causaron».
I am deeply concerned that millions of women & girls now face life-threatening risks, due to the lack of access to @UNFPA’s crucial services in #Afghanistan, #Bangladesh & #Pakistan.
Read my full briefing to @UNGeneva media today: https://t.co/xq9UoOSsnw pic.twitter.com/s8rdZiYSgg
— Pio Smith (@PioSmith_UN) February 4, 2025
El UNFPA trabaja en todo el mundo, incluso en Afganistán, donde más de nueve millones de personas están en “peligro” de perder el acceso a los servicios de salud y protección debido a la crisis de financiación de Estados Unidos.
«Cada dos horas, una madre muere por complicaciones prevenibles del embarazo, lo que convierte a Afganistán en uno de los países más mortíferos del mundo para las mujeres que dan a luz. Sin el apoyo del UNFPA, se perderán aún más vidas…«, apuntó.