El gobierno de México anunció el establecimiento del Expediente Médico Electrónico Universal en el IMSS, ISSSTE e IMSS-Bienestar, con el objetivo de que todos los ciudadanos puedan acceder a sus registros médicos, sin importar su derechohabiencia. Esta iniciativa busca facilitar la atención médica para toda la población, pero establecer un sistema de salud universal de este tipo implica resolver una serie de desafíos.
Actualmente, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ya administra el segundo Expediente Clínico Electrónico más grande del mundo, con más de 53.7 millones de expedientes y una vasta cantidad de registros, como notas médicas, recetas y estudios de laboratorio. Este sistema servirá de base para construir un historial médico universal, que aumentará la eficiencia en el análisis de datos de salud pública y permitirá una mejor toma de decisiones para políticas y estrategias sanitarias en México.
Ventajas de la Inteligencia Artificial en el Expediente Universal
Este Expediente Médico Universal también permitirá el uso de Inteligencia Artificial (IA) para la prevención de enfermedades y la optimización de diagnósticos y tratamientos. Con este sistema, los médicos podrán acceder a la información médica de cada paciente en tiempo real, evitando la repetición de pruebas y mejorando la precisión en los diagnósticos.
La IA contribuirá a predecir padecimientos, evaluar riesgos de enfermedades y estimar la eficacia de ciertos medicamentos. Según estudios de la UNAM, es posible identificar patrones en grandes conjuntos de datos, lo que permite detectar oportunamente enfermedades como el cáncer cervicouterino, vinculado a la infección persistente del Virus del Papiloma Humano (VPH).
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Obstáculos a superar
La implementación enfrenta varios obstáculos técnicos y logísticos. Entre los principales desafíos que destacan los especialistas en Tecnologías de la Información, está la conectividad en zonas rurales donde el acceso a Internet confiable y de alta velocidad es limitado. Para asegurar el funcionamiento del sistema en todo el país, se necesita infraestructura digital sólida en estas áreas de difícil acceso.
Otro aspecto fundamental es la capacitación del personal médico y administrativo para operar el sistema eficientemente. Además, la protección de la información médica de los pacientes es crítica: la seguridad contra ciberataques, accesos no autorizados y pérdida de datos será un requisito esencial para proteger la privacidad y evitar fugas de información.
Para garantizar la continuidad y estabilidad del servicio, el sistema debe contar con un mantenimiento constante, tanto técnico como humano, que permita evitar caídas y posibles afectaciones en la atención médica. Asimismo, se requiere apoyo e infraestructura para los adultos mayores y otros grupos que podrían tener dificultades para usar el sistema, sobre todo si no cuentan con acceso a un smartphone u otros dispositivos.
