Santiago Giménez y el AC Milán quedó fuera de la Champions League a manos del Feyenoord, en un encuentro que tenía totalmente dominado el cuadro rossoneri hasta que Theo Hernández se hizo expulsar y le abrió la puerta a los neerlandeses de igualar 1-1 el marcador y con global de 2-1 clasificar a octavos de final.
Sólo bastaron los primeros 38 segundos de iniciado el partido, para que Milán abriera el marcador 1-0 y pusiera tablas el global 1-1, porque en el encuentro de ida triunfó el exequipo de Santiago Giménez, el Feyenoord.
En un tiro de esquina, Malick Thiaw recentró con la cabeza y Santiago Giménez, con mucho oficio goleador, ganó la posición y cabeceó ligeramente el balón para mandarlo al fondo de las redes.
El mexicano Santiago Giménez logró aplicar la famosa ley del exfutbolista de forma casi inmediata, y, justo por su pasado en Países Bajos, no celebró su anotación.
El resto de la primera parte fue completamente para los italianos. Principalmente João Félix y Rafael Leão dieron una gran primera mitad, pues el primero orquestó el ataque milanista y el segundo fue un vendaval por el extremo izquierdo.
El daño de Theo Hernández
Por su parte, el Feyenoord mostró señales de vida por pocos momentos y el portero Timon Wellenreuther los mantuvo con pulso con buenas intervenciones.
Pero al minuto 51, el partido dio un giro de 180 grados debido a que Theo Hernández se ganó su segunda tarjeta amarilla y la roja automática, por fingir una infracción dentro del área rival, complicando a su equipo de forma completamente innecesaria.
Con las emociones a favor, los visitantes lograron ponerse al frente en la serie, con anotación de Julián Carranza al minuto 73.
El Milán intentó empatar el global más con corazón que con futbol, pero no fue suficiente y quedaron eliminados con el marcador global de 2-1.
Santiago “Bebote” Giménez jugó 71 minutos, en un partido donde hay poco de reprocharle a su accionar, pues anotó el gol de la igualada en el global, con lo cual le dio vida a su equipo y luchó mientras estuvo en el terreno de juego y de esta forma terminó su participación en la Champions League y Feyenoord a ver hasta donde llega.
Benfica sobrevive a la siguiente ronda
En el mejor partido del día, Benfica y Mónaco se jugaron la vida en un partido vibrante y lleno de emociones y en el cual los portugueses salieron avantes.
El Benfica pegó primero, después de una equivocación en la salida del Mónaco, que Vangelis Pavlidis aprovechó para dejar solo a Muhammed Aktürkoğlu para poner el primero en la cuenta.
Sin embargo, el Mónaco reaccionó y se negó a morir, por lo que 10 minutos después logró empatar el partido y acercarse en el global.
Para la segunda mitad, los del principado salieron de forma categórica a encontrar el empate, y poco tiempo les tomó encontrarlo con los pies de Ben Seghir.
Pablidis colocó el 2-2 de la noche, pero Ilenikhena puso adelante a los de casa y finalmente Orku Kokcu marcó para el 3-3 del encuentro y por marcador global de 4-3 calificó a octavos de final el conjunto portugués.
Noche de Brujas en Bergamo
El Atalanta salió caliente a buscar el gol del empate, pero acabó concediendo gol al minuto 3, después de una contra letal que culminó Chemsdine Talbi.
Esto no desmotivó a los italianos, que siguieron en búsqueda de reducir la distancia, hasta que en otro contragolpe Chemsdine Talbi consiguió su doblete y puso la serie 4-1 en el global.
Increíblemente, después de que el Brujas salvara dos goles en la línea, salió a velocidad para poner el 3-0 en el partido, del pie de Ferran Jutglà y con ello el aparente knock-out de La Diosa.
Después de 45 minutos, el partido parecía terminado, pero a los 40 segundos del segundo tiempo, Ademola Lookman puso el tanto que encendió la esperanza.
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Sin embargo, Simon Mignolet se puso la capa de héroe y detuvo todos los demás embates de las nerazzurri, incluido un penal.
Y con eso, el partido terminó con un global de 5-2, en favor de Brujas, que sorprendió a todo el mundo al clasificarse a octavos.
Bayern Munich, a octavos de final
Con un gol de Alphonso Davies al 94, Bayern Munich igualó 1-1 con Celtic para imponerse 3-2 en el marcador global y acceder a los octavos de final de la competencia.
Nicolas Kuhn adelantó al cuadro escocés al minuto 63 para dar la sorpresa de la jornada, pues el partido se estaba jugando en el Allianz Arena, pero el gol de Alphonso fue suficiente para la victoria global del cuadro alemán, uno de los siempre favoritos al título.
