enas 30 empacadoras de limón cerraron sus puertas de manera indefinida en Apatzingán, Michoacán, debido a las constantes extorsiones del crimen organizado, que les exige dos pesos por cada kilogramo del fruto que venden.
Lo anterior, a pesar de que los gobiernos federal y estatal vigilan la zona limonera del Valle de Apatzingán, con más de ocho mil elementos del Ejército Mexicano, Guardia Nacional, Guardia Civil y policías estatales.
La Asociación de Citricultores del Valle de Apatzingán (ACVA) detalló en un comunicado que las amenazas a trabajadores y líderes llevaron al cierre de las oficinas del Tianguis Limonero en la ciudad durante una semana.
“No es justo que se señale al sector como responsable de no emitir denuncias, cuando los principales generadores de violencia en la región cuentan con orden de aprehensión”, expresó y pidió a la ciudadanía sensibilidad por sus trabajadores.
Apatzingán tiene más de 30 empacadoras y en Buenavista, municipio líder de la producción limonera de Michoacán, hay 24 empresas de este tipo.
En Apatzingán y Buenavista, el paro de limoneros afectó a casi dos mil productores, y tan sólo en este último municipio operan más de tres productores.
Es en el Valle de Apatzingán donde el cultivo de limones es uno de los más importantes, con casi 80 mil hectáreas.
En Michoacán, la superficie sembrada que se destina a la producción de limón, en el avance al mes de octubre de 2022, es de 217 mil 580 hectáreas, y se mantiene como el principal productor nacional.
En los municipios de Apatzingán, Buenavista, Parácuaro, Aguililla, Tepalcatepec y Múgica se producen 600 mil de las 670 mil toneladas de limón que genera anualmente el estado.
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