Norberto Soto Sánchez
Psicólogo y maestro en Educación por la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Candidato a doctor en la UPN Unidad Ajusco.
Interesado en temas de violencia política en educación superior.
El 24 de febrero, el diario El Noroeste, uno de los principales medios de comunicación impresa y digital de Sinaloa, dio a conocer que Héctor Melesio Cuén Díaz, hijo del cacique universitario que fue amigo de Ismael “El Mayo” Zambada, Héctor Melesio Cuén Ojeda, los demandó por haber publicado unas fotografías suyas sin su consentimiento.
Las imágenes en cuestión fueron utilizadas en 87 notas informativas, columnas y editoriales que se elaboraron desde el diario. Además, la demanda refiere otra lista de 71 publicaciones que desde su cuenta de Twitter (hoy X) El Noroeste realizó utilizando dicho material gráfico. Los trabajos periodísticos señalados en el documento datan de entre mayo de 2023 y abril de 2024.
Procesos legales por compras irregulares
Durante esas fechas Melesio Cuén Jr., quien ocupó el cargo de director de Bienes e Inventarios en la Universidad Autónoma de Sinaloa, fue citado a distintas audiencias junto a integrantes del Comité de Compras y Adquisiciones de la UAS debido a procesos legales en su contra por compras irregulares, sin licitación, ascendientes a más de 500 millones de pesos, que las administraciones de rectoría de Juan Eulogio Guerra Liera y Jesús Madueña Molina llevaron a cabo a empresas ligadas a la familia Cuén Díaz y al Partido Sinaloense, instituto político local de extrema derecha que Melesio Cuén padre creó en agosto de 2012 mediante el clientelismo y la violencia brutal que impuso en la UAS durante casi 20 años, hasta que fue asesinado el 25 de julio de 2024 en una reunión que tuvo con los capos Ismael “El Mayo” Zambada y Joaquín Guzmán López, este último, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera.
Melesio Cuén Jr. y dos de sus hermanas han ocupado puestos directivos en la UAS durante muchos años, favorecidos por el cacicazgo que su padre configuró en la universidad como sistema de poder.
Cuén pide un porcentaje de las ganancias
Se han enriquecido a costa del presupuesto universitario. Empero, el Jr. considera que el uso de las imágenes en las publicaciones de El Noroeste le han “causado daños materiales e inmateriales severos” y exige que dicho medio le dé “no menos del 40 por ciento de las ventas del periódico impreso de los días en que se publicaron las fotos” (https://acortar.link/nE3zB4), esto, porque, según él, su imagen no atañe al interés general de la sociedad. Los abogados encargados de la demanda están en la nómina de la universidad (https://acortar.link/a0qVr3).
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La versión de El Noreste
Por su parte, el diario sostiene que las notas publicadas son de interés público, debido a que tienen que ver con el desempeño que el Jr. tuvo como funcionario público en la UAS, cuyo presupuesto, precisamente, proviene de la sociedad en general, con contribuciones que la clase trabajadora, sectores populares y comunidades indígenas aportan mediante impuestos con mayor sacrificio.
Para dar cuenta del nivel de cinismo con el que los integrantes de lo que queda de esta estructura en la UAS ─momentáneamente reducida a una formación de tipo casta dorada (véase la caracterización sociológico-política que hice de dichas estructuras antidemocráticos aquí https://acortar.link/HYEPyS)─ proceden respecto a este tema de corrupción flagrante, basta un botón: aceptaron su responsabilidad en el desfalco y llegaron a un acuerdo “reparatorio” con la Fiscalía de Sinaloa en el que solo pagarán 20 de los más de 500 millones desviados.
No obstante, rectoría UAS, cuyo titular es Jesús Madueña Molina, está exigiendo con amenazas a docentes y trabajadores de la UAS que “cooperen” con mil pesos, mínimo, para que las y los implicados cubran la sanción (https://acortar.link/5TQfDZ).
Nexos de la familia con el narcotráfico
Durante años los integrantes del cacicazgo cuenista han implementado campañas en la prensa estatal y nacional en las que se pintan como víctimas de persecuciones políticas. Muchos universitarios en el centro del país han creído esa falaz narrativa. En notas periodísticas en distintos medios de comunicación como Contralínea (https://acortar.link/nl6vFM), La Izquierda Diario México (https://acortar.link/d8xHdK), Insurgencia Magisterial (https://acortar.link/vsxNRv) y en la presente columna (https://acortar.link/IwqnsG) he sostenido durante los últimos cinco años que el cacicazgo cuenista fue el más violento de México; sus restos, en recomposición, siguen teniendo gran poder potencializado por sus nexos con importantes figuras de instituciones de impartición de justicia y de seguridad pública sinaloenses.
Muchos y muchas trabajadores, docentes y estudiantes de la UAS señalamos también los nexos de la familia Cuén Díaz con importantes personajes dedicados a la producción y trasiego de sustancias psicoactivas ilegalizadas, así como con generadores de violencia paramilitar en Sinaloa.
El “Mayo” Zambada, en su carta publicada el 10 de agosto de 2024, se refería a Cuén padre como un amigo suyo desde hace tiempo. El periodista Luis Chaparro, en entrevista con Adela Micha, aseguró que no solo eran amigos, sino que eran compadres (https://acortar.link/9iyPls). Habría que corroborar la información. De ser cierta, ¿Melesio Cuén Jr. es ahijado del “Mayo” Zambada?, ¿O lo es alguna de las hijas Cuén Díaz? Como sea, el vínculo con ese personaje y sus grupos es ya incontrovertible. Apoyado por ellos, esa familia ha perseguido feroz y morbosamente a disidentes durante bastante tiempo.
Sin reparación del daño
En el caso de mi esposa y mío, el trabajo periodístico que he realizado en torno al tema ─para el cual ella siempre me ha apoyado en labores de investigación─ nos orilló a huir de Sinaloa en 2019 para salvar nuestra vida (léase https://acortar.link/CUPklO & https://acortar.link/XfzPUw).
¿Dónde está la reparación al severo daño material e inmaterial que la deleznable estructura de los Cuén Díaz nos ha causado no solo a nosotros sino también a los alrededor de 700 despedidas y despedidos injustificadamente de la UAS (entre los que me incluyo) por luchar contra el cacicazgo?, ¿Dónde está la reasignación de tiempos completos que fueron otorgados inmerecidamente a militantes del Partido Sinaloense en detrimento de los derechos laborales de las y los disidentes democráticos de la UAS?, ¿Y la reparación al daño a la educación pública que esta familia ha causado no solo en Sinaloa sino también a nivel nacional, pues durante años han tenido un importante lobby político para la aprobación de reformas y leyes que les han favorecido? (véase https://acortar.link/J2FMnG & https://acortar.link/OIB5wG).
Campaña para presentar a los victimarios como víctimas
Como ya lo mencioné, la demanda en cuestión, interpuesta por el Jr., se enmarca en una campaña que tiene décadas y que busca presentar a estos victimarios como víctimas. En años anteriores el mismo Cuén padre interpuso demandas contra otras periodistas para amedrentarlas (https://acortar.link/vLqZo3).
Entre otras cosas, forma parte de una operación noopolítica, es decir, de la instrumentalización de la información (en forma de infodemia), el conocimiento y la propaganda para el logro de objetivos políticos, mediante la captura de la cognición de colectividades a las que se les impone representaciones, en una dinámica socioeducativa, es decir, una que tiene que ver con una pedagogía política que se presenta en la cotidianidad, en espacios y medios que van más allá de los educativos-formales. Se trata de lo que podríamos llamar, para el caso, una pedagogía de la confusión para la dominación.
Reelección del rector de la UAS
Por otro lado, el rector Jesús Madueña Molina estará buscando la reelección en los próximos meses; él y los cuenistas ya están moviendo sus piezas para coaccionar el voto de toda la comunidad universitaria a su favor. Las acciones colectivas para mostrar el descontento y la corrupción de este grupo deben radicalizarse y ser impulsadas en los pasillos de las facultades, escuelas, unidades académicas y departamentos de todas las unidades regionales de la UAS.
El sector democrático de esta institución educativa, con organizaciones como Civitas y el Movimiento Democrático Universitario y Estudiantil ─entre otras─, debe observar lo que está pasando en otras universidades del país, como en la Autónoma de Zacatecas, donde el Sindicato del Personal Académico decidió estallar huelga el pasado 17 de febrero para luchar contra la casta dorada liderada actualmente por el rector Rubén Ibarra Reyes.
Las y los docentes de la UAZ han articulado sus esfuerzos con las movilizaciones magisteriales de las secciones 34 y 58 del SNTE-CNTE (consúltese la cobertura especial que se hizo desde La Izquierda Diario México durante la última semana https://acortar.link/2jr8Xx).
Llamado a la lucha
Este último, es un importante proceso que, aún con contradicciones y límites, puede escalar y evolucionar hasta desarrollar tendencias cada vez más democráticas y clasistas desde una sólida e intransigente perspectiva de clase trabajadora. Hay que hacer esfuerzos por conformar un potente frente de lucha universitario contra los cacicazgos y las castas doradas educativas a nivel nacional, y que delibere y actúe con absoluta independencia política respecto a todos los partidos políticos burgueses.
Ahora bien, en el ámbito periodístico, esta demanda del Jr. Héctor Melesio Cuén Díaz, sostenida con recursos de la UAS, es una agresión no solo contra el periodismo crítico y democrático en Sinaloa, sino a nivel nacional. Mi solidaridad con las y los trabajadores de la comunicación del periódico El Noroeste.
¡Fuera la familia Cuén Díaz de la UAS!, ¡Fuera el PAS de la UAS!, ¡El cuenismo no pasará!